La Romana.- La Unión de Empresarios de La Romana (UDER) ha alzado su voz de alarma ante el creciente problema de seguridad que afecta a los comerciantes en la ciudad.
En una declaración pública, la UDER denunció que los delincuentes están actuando con total impunidad, convirtiendo a los comerciantes en blancos fáciles incluso en plena luz del día y en lugares concurridos.
El último episodio que ha intensificado la preocupación de la UDER fue el reciente intento de asalto al comerciante Juan Alberto Atiles Richiez, propietario de Casa Chilelo.
Este incidente no solo puso en riesgo la vida del comerciante, sino que también ha llevado a la UDER a exigir una respuesta contundente de las autoridades ante la creciente inseguridad que azota la ciudad.
«La inseguridad está arropando a nuestra sociedad y es un problema que no podemos seguir ignorando. Si no se toman medidas drásticas, la situación podría salirse de control», advirtió la UDER en un comunicado de prensa.
La UDER expresó su profunda preocupación, señalando que el asalto a Atiles Richiez podría haber terminado en tragedia. Esto ha llevado al gremio empresarial a instar a las autoridades civiles y militares a tomar medidas urgentes para garantizar la seguridad de la población.
En su comunicado, los empresarios de La Romana hicieron un llamado directo al general Juan Pablo Ferreira Veras, director regional Este de la Policía Nacional. Exigieron que se redoblen los esfuerzos para capturar a los responsables de este y otros hechos delictivos que han consternado a la comunidad.
«Confiamos en la capacidad y profesionalidad de nuestras autoridades para dar con el paradero de estos antisociales y ponerlos a disposición de la justicia», puntualizó la UDER.
La situación planteada por la UDER destaca la necesidad urgente de abordar la inseguridad en La Romana. Los comerciantes, motor económico de la ciudad, claman por medidas concretas que devuelvan la tranquilidad a sus vidas y negocios.
La comunidad espera respuestas inmediatas por parte de las autoridades para restaurar la confianza en la seguridad pública y frenar la ola delictiva que amenaza la paz en La Romana.
Por: Abrahan Nuñez
Fuente: Diario Libre
