La Romana, R.D.- El protagonista de este singular artículo, posee sus propios méritos de tildársele como personaje ya que su figura emula de forma automática la venta del popular hot dog en la parte contigua al Parque Juan Pablo Duarte de esta ciudad.
Nos referimos al reconocido Kiko Hot Dog, que tal reza el título de nuestro artículo, es el referente indiscutible de la venta de este emblemático tipo de comida rápida en la ciudad de La Romana.
Geovanny Herrera Javier, nombre de pila del popular «Kiko Hot Dogs», nació en Las Lagunas de Nisibón en 1976 y una década después migró a La Romana instalándose en el populoso barrio de Villa Verde.
Sus inicios en la venta de comida rápida, van de la mano de Carlos Pichardo (DON HAM), primera persona en La Romana que implementó a principio de los 90s el expendio de hamburguesas y hot dogs en un carrito o puesto móvil. En ese entonces el futuro » Kiko Hot Dogs» contaba con 14 años y era ayudante del cibaeño Pichardo.
En poco tiempo Herrera Javier decidió montar tienda aparte y así nació «Kiko Hot Dogs» en la zona más dinámica de la Calle Duarte próximo a las principales discotecas de esa época resultando en un éxito inmediato ya que los clientes usualmente asiduos visitantes a discotecas y centros de entretenimiento nocturno, optan por comer algo rápido, ligero, sabroso y que no lacerara su bolsillo, siendo el hot dog, la alternativa ideal.
Pero, ¿De dónde proviene realmente el hot dog o perro caliente en español?
Los orígenes del hot dog se remontan al siglo XIII y Frankfurt, en Alemania, es la ciudad primaria donde comenzó el consumo del popular perro caliente, basado en carne de cerdo en forma del citado manjar.
El término Frankfurter Würstchen, como se le identificaba en sus orígenes, se entregaban al pueblo con motivo de las coronaciones imperiales, comenzando con la coronación de Maximiliano II, Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, como Rey.
«Wiener» se refiere a Viena, Austria (alemán: Wien), hogar de una salchicha hecha de una mezcla de cerdo y ternera y se maneja la teoría de que Johann Georg Lahner, un carnicero de los siglos XVIII y XIX de la ciudad de Coburg, en Franconia, trajo el Frankfurter Würstchen a Viena, donde agregó carne de res a la mezcla y simplemente lo llamó Frankfurter.
En la actualidad en los países de habla alemana, excepto Austria, las salchichas para perros calientes se llaman Wiener o Wiener Würstchen (Würstchen significa «pequeña salchicha»), para diferenciarlas de la mezcla original de solo cerdo de Frankfurt. En alemán suizo, se llama Wienerli, mientras que en Austria se usan los términos Frankfurter o Frankfurter Würstel.
La popularidad del perro caliente llegó a EE.UU. inexorablemente ligada al béisbol, la ciudad de Chicago y Nueva York. Tanto así que era la comida callejera de clase trabajadora en esa nación, tornándose en algo omnipresente durante el siglo XX.
En Estados Unidos los términos alternos son Frankfurter, Frank, Wiener, Weenie, Tube Steak, Salchicha, Banger y Coney, aparte del común hot dog.
¿Por qué se le llamó «Perro Caliente»?
Volvemos a reseñar el origen en Alemania en donde término «perro» se ha utilizado como sinónimo de «salchicha» desde el siglo XIX, quizás por las acusaciones de que los fabricantes de salchichas usaban carne de perro en la fabricación de éstas.
En Alemania, el consumo de carne de perro era común en Sajonia, Silesia, Anhalt y Baviera durante los siglos XIX y XX y la sospecha de que las salchichas contenían carne de perro estaba «ocasionalmente justificada».
Una publicación impresa de Indiana (EE.UU.), el Daily Courier de Evansville, fechada el 14 de Septiembre de 1844 hacía referencia al término hot dog. Pronto, otros rotativos seguían la tendencia como los casos del Daily Press de Paterson (Nueva Jersey) en diciembre de 1892; el New Brunswick (Nueva Jersey); Daily Times (20 de mayo de 1893), el New York World (26 de mayo de 1893) y el Knoxville Journal de Tennessee (28 de septiembre de 1893), se registra el uso de la palabra hot dog.
¿Dónde está Kiko Hot Dog ahora?
Sea usted de La Romana o no, pierda cuidado que acto seguido pregunte por los mejores hot dogs de la ciudad, le indicarán ir a la calle Dr. Gonzalvo (entre la Duarte y la Altagracia) y allí encontrará al célebre Kiko con su clásico carrito de hot dog.
Es imposible hablar sin que alguien haga referencia a Kiko Hot Dog en La Romana. Él es pionero en ese menester y protagonista de una práctica que es sinónimo de trabajo honesto, tesonero y dedicado de alguien quien toda su vida ha brindado una sonrisa previo a preguntar «¿Cuántos quiere? ¿Para comer o llevar?».
Por Marcos Sánchez (Especial para Serie26.com)
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